Según datos del último informe anual de Vigilancia Epidemiológica de VIH y sida de la Comunidad de Madrid con datos hasta el 31 de diciembre de 2016, el 60% de los pacientes infectados por el VIH que murieron en el período 2007-2016 lo hicieron por eventos no sida con la siguiente distribución: tumores no sida 17,6%, hepatopatías 16,5%, enfermedad vascular 3,8% y otras causas 22,1%. En el caso de las hepatopatías, el 18,8% habían desarrollado hepatocarcinoma (datos no publicados).
Según los datos aportados por el informe de la CM el 23,5% de los pacientes fallecieron por eventos sida, el 60% por eventos no sida, y en el 16,5% restante no se dispuso de información. Considerando que en el grupo de éxitus sin información podrían incluirse casos de muerte por eventos no sida es de suponer que el porcentaje de muertes por esta causa sea mayor al 60% citado en el epígrafe inicial.
No obstante, cuando se analizan las causas de éxitus en diagnósticos recientes los eventos sida cobran un mayor protagonismo. Analizando las causas de mortalidad en los pacientes diagnosticados de infección por el VIH en el período 2007-2016, los eventos no sida representaron el 32,7% en los casos de muerte a corto plazo (en el primer año tras el diagnóstico), el 38% a medio plazo (entre 1 y 4 años después del diagnóstico) y el 69,8% a largo plazo (más de 4 años después del diagnóstico). Esta diferencia obedece al recuento de linfocitos CD4+ al diagnóstico. Así, presentaban enfermedad avanzada (recuento de linfocitos CD4+ inferior a 200/µl al diagnóstico) el 84,2% de los pacientes fallecidos en el primer año tras el diagnóstico, el 63,1% de los fallecidos entre el segundo y cuarto año, y el 35,1% de los fallecidos a largo plazo.
Estos datos, en su conjunto, ponen de manifiesto el importante papel que juegan los eventos no sida y las comorbilidades asociadas a la infección por el VIH como causas de fallecimiento en esta población.
Por otra parte, y siguiendo con los datos del mismo informe, la mediana de supervivencia de los pacientes infectados por el VIH ha ido incrementándose progresivamente a lo largo de los años. La mediana de supervivencia del total de pacientes incluidos en el registro, que ascendía a 42.325 a 31 de diciembre de 2016, fue de 199 meses (16 años y 7 meses). Esta mediana se ha incrementado a lo largo de los años arrojando estas cifras: (i) período 1982-1990: 111 meses (9 años y 3 meses) (ii) período 1991-2000: 178 meses (14 años y 10 meses) (iii) período 2001-2010: 212 meses (17 años y 8 meses) y (iv) período 2010-2016: 280 meses (23 años y 4 meses).
Aunque la mediana de supervivencia continúa aumentando, las cifras actuales en la CM están por debajo de los valores esperables dada la eficacia del tratamiento antirretroviral actual. Para incrementar la supervivencia debe mejorarse el diagnóstico precoz (ver epígrafe específico en el informe de la CM), disminuir la exposición a noxas exógenas, como el tabaquismo, y diagnosticar precozmente y tratar de forma eficaz las comorbilidades y eventos no-sida.